Los Amantes

Ajusto suavemente la venda de tus ojos

y tú pasión

vuelve a desatarse para mí…

El deseo de tu piel

procura anticiparse una y otra vez

a las caricias con las que recorro poco a poco tu cuerpo.

Tus manos impacientes

se aferran con más fuerza al respaldo de esta cama de hotel

mientras con mis besos

transito lentamente el camino de tu intimidad…

Mis dedos llegan a tus labios presagiando el placer

y recorro con mi boca

los contornos de esa ligas que llevas solo para mí…

Subo despacio

siguiendo el prohibido deseo de tus instintos

y me empujas a tu piel

y en un instante,

vuelves a ser mía una vez más…

Se que luego regresarás con él

y que para mí

solo quedarán los recuerdos de estos secretos momento de los dos…

Pero teniéndote aquí, de nuevo entre mis brazos

comprendo que el amor

tiene que ver con el perfume

no con la flor…


Alejandro Savino